Cuando Johan nació fue muy dificil por las circunstancias en las que estabamos, lejos de nuestra familia, y solo nos aferramos a nuestra FE, y de esta manera le prometimos a la Virgen de Guadalupe que cuando Johan estuviera bien lo llevariamos a su santuario para darle gracias por su vida y por todo lo que nos da cada día, estas fotos son de ese día, fue muy emotivo pués siempre estar frente a la Virgen es una emoción muy grande. Nos acompañaron mi mamá que ha sido un apoyo muy grande, mi hermana, mi cuñado y mi sobrinito Diego.
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